Artwork by Takato Yamamoto Opere |
Mira,
la vida es dura. Con decirte que su fin es la muerte, imagínate, ¡qué cosa más
macabra! El dolor que sientes no se te va a ir. Tendrás que aprender a vivir
con él. Lograrás hacerlo chiquito muchas veces. Olvidarte de él como te
olvidarás de mí. Y aún así habrán días negros revueltos de despedidas y de
desear no haber nacido. Es parte de este juego. Sonará esa canción y volverás a
odiarme como si no hubieran pasado 5 años. Yo también te odiaré a ti cuando
vengas a mi mente sin buscarte. Me preguntaré dónde estás, igual que me lo
pregunto ahora. Y maldeciré mi memoria, los días que se fueron y la madre que
te parió. Joder, ¡qué malhablado! Pero es así, tú bien lo sabes. Al rato se nos
pasará la rabia putrefacta de años sin superar. Sonará otra melodía, miraremos
el atardecer. Pensarás en lo que vino después de mí. En el viaje a Nicaragua.
En lo que callas que ni falta te hace decir, porque ya lo revela tu mirada de
vieja experimentada. No te quiero decir con esto que me echarás de menos. No.
Te daré igual en un tiempo. Esconderte por temor a sufrir no te salvará. Llevas
la pena dentro de ti, en tus ojos; la vas a ver en todas partes, aunque huyas.
Quiero invitarte a que pienses en esto. A que te enfrentes a lo que estás
sintiendo desde la aceptación. Y a que confíes en que, aunque la vida sea una
mierda, habrán otros días, instantes, hermosos, por los que creerás que ha
merecido la pena soportarte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario